En la prensa nacional e internacional vemos y leemos en la noticias, historias de menores de edad que son hábiles sicarios y asesinan a una habilidad tan rápida como un adulto entrenado para matar.
Es tiempo de que las familias, las iglesias, las instituciones que tienen que ver con los jóvenes, los medios de comunicación, nuestros gobernantes en fin todos la sociedad se una para enfrentar ese mal y buscar soluciones.
Ya que se habla mucho de politiquería, la borreguera y chácharas televisivas.
Dando poca importancia a los niños sicarios, que la mayoría practica el crimen y usa la violencia por la poca educación, la desintegración familiar, la pobreza extrema y la indiferencia de nuestros gobernantes.
