El Papa Benedicto XVI llegó el martes a Estados Unidos en su primera visita al país después de decir a los periodistas en su avión que el sacerdocio era "absolutamente incompatible'' con el abuso sexual de niños y prometió ayudar a sanar las heridas que ello ha infligido a la Iglesia Católica.
El avión de Benedicto aterrizó a las 3:50 p.m. en la Base Aérea de Andrews, donde fue recibido por el presidente Bush. Es la primera vez que el Presidente ha viajado a la base para recibir a un dignatario.
Los dos se reunirán en privado este miércoles, cuando se espera que discutan asuntos como la reforma de inmigración y la guerra en Irak.
Veinte minutos después que el avión especial de Alitalia aterrizó en Maryland, el Papa, que celebra su 81 cumpleaños hoy, se presentó en la puerta. Bajó con ligereza la rampa, donde fue recibido en la alfombra roja por Bush, la primera dama Laura Bush y su hija Jenna.
Les dio la mano a los Bush y luego saludó a los dignatarios católicos, que le besaron el anillo papal.
Durante el viaje, Benedicto declaró a los reporteros que trabajaría para sanar a la Iglesia Católica.
"Estamos profundamente avergonzados'', dijo. "Haremos lo que sea posible para que esto no vuelva a suceder. Haremos todo lo posible por sanar esta herida'', dijo el Papa, agregando que ‘‘los pedófilos no pueden ser sacerdotes. Excluiremos totalmente a los pedófilos del sagrado ministerio''.
Los numerosos escándalos de abuso infantil les ha costado a las diócesis católicas cientos de millones de dólares, las obligó a vender propiedades y ha complicado las relaciones entre los feligreses y su clero.
"Para reparar el daño, los sacerdotes y los obispos tienen que estar vigilantes, usar el sistema judicial, si es posible, y seleccionar mejor a los aspirantes a sacerdotes''.
"Es más importante tener buenos sacerdotes que muchos sacerdotes'', declaró Benedicto.
Benedicto declaró a los periodistas que viajaban en el avión que reconocía el problema.
"Es un gran sufrimiento para la iglesia en Estados Unidos y para la iglesia en general, y para mí personalmente, que esto sucediera'', dijo Benedicto. "Es difícil para mí comprender cómo fue posible que sacerdotes traicionaran de esta manera su misión... con estos niños''.
Durante su estadía, Benedicto se reunirá con líderes de la iglesia el miércoles. Hablará ante la ONU y visitará el punto cero en Manhattan, donde las torres gemelas fueron destruidas en un ataque terrorista que costó casi 3,000 vidas en el 2001. También celebrará una misa en el Yankee Stadium en el Bronx.
Fuente: El Nuevo Herald